Respaldar los archivos de su teléfono, guardar miles de fotos y trabajar simultáneamente con un equipo de trabajo de la universidad son algunas de las utilidades que ofrece la nube para las personas en general, sin embargo, gestionar la nube ofrece más ventajas para las empresas. Ya sea pública, privada o híbrida, una estrategia de administración bien diseñada puede ayudar a los profesionales de TI a controlar estos entornos informáticos que son dinámicos y escalables.
La importancia de gestionar la nube radica en la optimización, ésta sirve para eficientar procesos dentro de la empresa. A pesar de ello, hay que tener en cuenta que, al final, la manera en que se gestionará la nube dependerá de las prioridades y los objetivos individuales.de la empresa. No obstante, hay prácticas generales que las mismas empresas pueden adoptar.
“La gestión de la nube se refiere al ejercicio de control sobre los recursos y servicios de infraestructura de nube pública, privada o híbrida. Una estrategia de administración de la nube bien diseñada puede ayudar a los profesionales de TI a controlar esos entornos informáticos dinámicos y escalables.”
Mejores prácticas
1. Plan de mitigación de riesgos
Prevea cualquier posible amenaza que pueda surgir teniendo un plan, algunas acciones a realizar sería, por ejemplo, generar respaldos de información. En este punto también se debe tomar en cuenta la seguridad para mantener protegida la información de la empresa por lo que se podría contemplar la encriptación y la gestión de identidades electrónicas.
2. Monitoreo constante
Aunque es una tarea compleja, el monitoreo constante de la nube —que involucra métricas, seguimiento y análisis de registros— ayuda a evaluar el estado de la nube. También se debe tener en cuenta el mantenimiento de la infraestructura utilizada. De esta manera, todo marchará sin complicaciones.
3. Gestionar el costo TCO
A pesar de que ciertos proveedores ofrecen espacio gratuito de almacenamiento, esta cantidad no es viable para las empresas, pues manejan grandes cantidades de información. Es por esto que las empresas optan por pagar para obtener mayor espacio de almacenamiento. Una buena práctica en este sentido sería contemplar los gastos que implican mudarse y permanecer en la nube.
A pesar de que algunos proveedores de la nube ya ofrecen calcular el costo de la nube, a veces no contemplan realmente todo lo que implica para una empresa. El tener una visión completa del costo, permite a los planificadores de TI, realizar mejores asignaciones de recursos.
4. Contar con un equipo técnico
El equipo técnico además de apoyar en situaciones cotidianas, se podría encargar de supervisar el crecimiento de la nube para que los integrantes de la empresa la usen adecuadamente —por ejemplo, para que no tengan archivos innecesarios que impliquen pagar por más almacenamiento—. De esta manera, se podrían evitar posteriores problemas de seguridad y administración.
5. Gobierno centralizado
El contar con un gobierno centralizado permite estandarizar reglas, políticas y controles lo que implica la reducción en la complejidad de la gestión. A su vez, esto facilita que los recursos correctos lleguen a los usuarios correctos.
El 96% de las organizaciones que invirtieron en Big Data y AI para mejorar sus procesos ha logrado resultados exitosos.
La gestión de la nube para las empresas se debe considerar cuando se considera migrar los datos a este gran entorno digital, pues prepara a su empresa para los cambios inherentes del mundo digital y brinda flexibilidad al entregar la información al usuario adecuado en cualquier momento.
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